Unidos por una pasión: La hinchada mixta se tomó las tribunas del Clásico Universitario

En una jornada ejemplar, más de mil niños, niñas y padres disfrutaron del clásico universitario compartiendo en la misma tribuna, gracias a la iniciativa “Vamos al estadio” que busca fomentar la sana convivencia y el respeto en los estadios.

 

Con alegría y respeto se llevó a cabo la cuarta hinchada mixta, donde seguidores de la Universidad de Chile y la Universidad Católica disfrutaron del clásico en una misma tribuna, como muestra de la sana convivencia que debe existir en los estadios.

La actividad enmarcada en la iniciativa “Vamos al Estadio” del Departamento Estadio Seguro del Ministerio del Interior y Seguridad Pública y de la ANFP, permitió que 1.000 niños, niñas y padres, se ubicaran en el sector que usualmente se usa de colchón de seguridad para separar a las hinchadas. El resultado: una jornada ejemplar.

Los niños y niñas de las escuelas deportivas de la Universidad de Chile y la Universidad Católica disfrutaron del partido sin problemas, siendo una ejemplo de cómo se puede ver el fútbol con rivalidad pero sin violencia y promoviendo una sana convivencia. Además, participaron de actividades educativas que fomentan el compañerismo, el respeto y los valores del deporte.

Andrés Otero, jefe de Estadio Seguro valoró la iniciativa y su continuidad en el tiempo: “Hoy lo estamos haciendo en uno de los clásicos más importante del fútbol chileno. Existe una rivalidad, rivalidad deportiva, pero eso queda en la cancha, afuera todos estamos unidos por la misma pasión que es el fútbol y acá los niños lo han demostrado”.

Por su parte, la ministra del Deporte, Pauline Kantor destacó la importancia de involucrar a niños en actividades que fomenten la pasión por el fútbol.

“Cuando uno parte haciendo esto desde los niños, son ellos mismos los que después le van a decir a sus padres que nosotros somos capaces de conversar, nos sentamos en la banca, cada uno va a alentar a su equipo, pero al final somos amigos. Y es eso lo que queremos transmitir y traspasar a los adultos que a veces no lo han logrado muy bien”, aseguró.

La hinchada mixta vivida entre azules y cruzados, es una experiencia realizada anteriormente este año en los encuentros entre San Luis de Quillota y Unión La Calera, en la que 200 niños de cada club disfrutaron del tradicional clásico provincial. Luego se repitió en el clásico de colonias entre Unión Española y Audax Italiano con cerca de 300 niños de cada club en el estadio Santa Laura, y posteriormente en el clásico de la Cuarta Región entre Coquimbo Unido y Deportes La Serena.

Afortunadamente esta iniciativa no termina a los 90 minutos de juego, sino que compartir la tribuna es una excelente oportunidad para estrechar lazos más allá de la cancha.

Según cuenta Hugo Muñoz, director de la ANFP se realizan “seguimiento después de las actividades y se han generado lazos entre ellos, entre los apoderados, y eso hace que la familia entienda que el estadio es una instancia de acercamiento, de concordia y de compartir. El fútbol mueve las mejores y perores pasiones del ser humano y nosotros queremos que en el estadio estén sólo las mejores”.

En la actividad realizada bajo el lema “Distintos colores, una misma pasión”, también participaron la Intendencia Metropolitana, Carabineros de Chile, el Ministerio del Deporte e importantes embajadores de cada club: Diego Rivarola por los azules y Milovan Mirosevic, en representación de los cruzados.